Las estrellas deben brillar.

Las joyas de la corona.

Que tal amigos!!

He vuelto a escribir en este su blog para plasmar mi sentir y analizar lo acontecido el pasado lunes con la deserción de dos peloteros cubanos más, es una entrada larga, espero me complazcan con su lectura.

Es por todo mundo sabido que el deporte cubano es potencia a nivel mundial podemos hablar por individuos con nombres como Javier Sotomayor, Teófilo Stevenson, Alberto Juantorena, Ultiminio Ramos entre otros o en conjunto como los equipos de Volleyball o beisbol; en justas mundiales Cuba siempre presenta atletas sumamente competitivos, y a pesar de ser una pequeña nación, los caribeños obtienen un buen porcentaje de medallas y muchas de ellas son áureas.

Antes del triunfo de la revolución (en 1959) los atletas cubanos eran libres de moverse por el mundo y cobrar por sus servicios en su país o fuera de él como cualquier otra persona del planeta, pero con la llegada de Fidel Castro al poder, llegó también la prohibición del deporte profesional en Cuba.

Hubo tal migración de atletas que a México llegaron muchos excelentes boxeadores como el antes mencionado Ultiminio Ramos y el enorme José Ángel “ Mantequilla” Nápoles por citar solo dos nombres que terminaron radicando y luciendo enormidades a los ojos del mundo.

Ya abordando el tema del beisbol, Cuba siempre ha sido potencia en ésta disciplina, cada Olimpiada o torneo en donde participa da muestras del enorme talento y la magnífica escuela que tienen en la isla y en México (antes de la revolución cubana)  muchos cubanos vinieron a irradiar talento, mencionaré solo tres nombres: Basilio Rosel (mejor conocido como “El Brujo”), Martín Dihigo y Lázaro Salazar (conocido como el “Príncipe de Belén”) cualquier aficionado del beisbol con solo leerlos comprende la magnitud del talento que se produce en la mayor de las Antillas y los que no están muy inmersos en la pelota con una simple ojeada en la web a los números de estos señores, va a darse una idea.

Después de la llegada de Castro al poder y con la instauración del régimen socialista, el deporte cubano se hermetizó y solo se podía ver a los atletas en competencias mundiales como Juegos Olímpicos, ya no llegaron peloteros a México como antes y, evidentemente y como es normal, eso no era bien recibido por todos los deportistas ya que teniendo tanta capacidad y pudiendo tener una calidad de vida mayor fuera de Cuba era frustrante regresar a vivir con limitaciones.

El gobierno cubano prohibió la salida de atletas de  manera total y todos aquellos que lograban llegar a los Estados Unidos a practicar su disciplina (y cobrar como profesionales, claro está) eran tachados de desertores y enemigos de la patria.

Un caso muy sonado fue el del lanzador nativo de Marianao, Luis Tiant que al ser adquirido por los Indios de Cleveland en 1961,  fue vetado de regresar a Cuba y no pudo ver de nuevo a sus padres sino hasta 1975.

Mucho talento se desperdiciaba y muchos scouts americanos, asi como cubanos que durante las revueltas lograron llegar a Miami, seducían a los peloteros para aventurarse al sueño y puedo decir, sin duda alguna, que muchos atletas salieron sin que nadie se los pidiera en busca de una vida mejor y sobre todo digna.

Existen  jugadores como Orlando “Duque” Hernández ( éste señor ganó 4 series mundiales), el de Liván Hernández, Kendrys Morales y más recientemente Aroldis Chapman y Yoennis Céspedes  que se aventuraron al sueño, fueron criticados, por no decir satanizados, por las autoridades en Cuba, idolatrados por el pueblo caribeño y amados en Estados Unidos por el enorme talento que tienen pero las joyas de la corona cubana se perdieron el lunes por la madrugada.

Los hermanos Yulieski y Lourdes Gourriel desertaron a la selección cubana que representaba al país antillano en la Serie del caribe que se llevó a cabo en República Dominicana (Cuba regresó a participar apenas desde el pasado año) y esto representa el golpe más fuerte a la pelota isleña en la actualidad.

Enseguida se dijo que ambos se fugaron “en franca actitud de entrega a los mercaderes del béisbol rentado y profesional” y yo honestamente celebro el que lo hayan hecho.

Debo admitir que soy fan de Yulieski, lo vi jugar en el Clásico mundial de beisbol del 2006 cuando el espirituano (dado que es nativo de Sancti Spiritus) tenía apenas 22 años y quedé maravillado con su facilidad y talento, cumple con las herramientas que todo cazatalentos busca, buena defensa, buen contacto, poder, buen brazo y velocidad; sin embargo, a pesar de ser buscado por muchos agentes y equipos de las Grandes Ligas tenía que someterse al régimen y seguir recibiendo pagos ínfimos como amateur en la Liga Nacional Cubana, en la cual por cierto ha dejado numero impresionantes, se los comparto a continuación:

Volvió a representar a Cuba en el segundo Clásico Mundial en 2009, en esta ocasión vino a México con su selección a derrochar talento ante el mundo de nuevo, pero una vez más tuvo que volver acabado el torneo.

Yulieski es hijo de Lourdes Gourriel un 24 veces ganador de medallas en beisbol (todas de oro salvo 2) y una gloria de la pelota cubana, que además de eso tiene un cargo en el deporte de su país, funge de agente de sus hijos y estaría bien enterado de los avances entre el gobierno isleño y las grandes ligas para permitir la salida de jugadores a los Estados Unidos por lo que mucha gente se sorprendió con la fuga de sus hijos que tienen 31 y 22 años respectivamente.

Yo me saqué de onda por un momento pero no me costó trabajo entender la razón de su partida, a los 22 años de edad y con el talento en su juventud Yulieski fue secado por Fidel, era la gloria de la pelota de los últimos años y ese fue su mayor pecado, el mandatario se sentía orgulloso de tenerlos a  él y a su familia, pero los intereses cambian y la vida obliga a las estrellas a brillar.

En 2014 Yulieski tuvo la oportunidad de jugar (con permiso de los altos mandos) en la liga de Japon, recibió un pago de 1 millón de dólares por un año, una burla para lo brillante que es, del cual tuvo que pagar 10% al gobierno cubano y sus impuestos en el país oriental, probó otros aires y como era natural, lució.

Lourdes Jr es 10 años menor que Yulieski, según reportes tiene las 5 herramientas que su hermano pero dicen que su techo es aún más alto, ambos podrían lograr contratos por 50 millones de dólares en MLB y serán buscados por muchas de las 32 franquicias y quien sea que logre firmarlos habrá adquirido una verdadera joya, lo digo sin temor a equivocarme.

Se fueron, no hay más, muchos cubanos aplauden el hecho y aseguran que la liga local le quedó chica al mayor de los dos desde hace mucho, la verdad es que el famoso “acuerdo” entre Cuba y la MLB está lejos y desde mi análisis pienso que Yulieski no quiso ver a su hermano perder los mejores años de su vida atrapado sin lucir ante el mundo, tal como el régimen lo había hecho con él, salieron y brillarán.

Yo solo puedo decir que destacarán, las estadísticas no mienten y lo único que lamento es que no nos hubieran dejado disfrutar desde antes de ese talento.

Sea cual sea el destino de ambos, yo siempre seguiré y gozaré cada juego donde se pare en el diamante o en el plato a batear el  01, el 10, mi ídolo ( y ahora más) :

El gran Yulieski Gourriel Castillo.

Saludos!